domingo, 23 de abril de 2023

Biodiversidad en Estepa

 




El 16 de marzo tuvo lugar en la sevillana Estepa un maratón de biodiversidad (Bioblizt) impulsado por El Pájaro de la Miel, que resulta ser el primero que se hace, una estupenda iniciativa que involucró a jóvenes de la localidad acompañados por tres expertos que los dividieron en tres grupos (plantas, aves e invertebrados). Yo fui invitado como guía de invertebrados por Javi Pérez, quien a su vez fue el guía de aves y buscó a una tercera compañera para guiar en cuanto a plantas respecta.

Tras el tiempo estimado, y pese a las desfavorables condiciones de la salida con un fuerte viento, se detectaron 138 especies de seres vivos, muchas de ellas investigadas posteriormente para dar con su identidad. El lugar concreto escogido fue el Cerro de San Cristóbal, que cuenta con proyectos de conservación como la colocación de cajas nido para aves insectívoras o el censo anual de cernícalo primilla.




Cernícalo vulgar versus cuervo

Oruga de lepidóptero nocturno

Parageron sp.

Eucera sp.

Oruga de Helicoverpa sp.

Osmia sp.

Psilothrix viridicoeruleus

Eurydema sp.

Culebrilla ciega (Blanus cinereus)

Nemésido

Efímera

Silene sp.



Los resultados, más desgranados, arrojaron un total de 76 especies de plantas, 26 de aves, 2 de reptiles, 10 de lepidópteros, 10 de himenópteros, 5 de coleópteros o 6 de dípteros, entre otros. Todos los datos fueron subidos a la plataforma Observation.




En otro momento, mientras Javi se tenía que ocupar de unos asuntos familiares, yo me di una vuelta en solitario por la local Sierra del Moralejo, que me supuso un agradable paseo por el monte mediterráneo hasta caer la noche mientras, de manera inesperada y sorprendente, oía varias veces el reconocible reclamo de un mirlo capiblanco que andaría en paso migratorio.




Orchis collina


Almirante rojo (Vanessa atalanta)


Narcissus assoanus


Narcissus papyraceus




Cerca del cortijo igualmente llamado El Moralejo disfrutamos de un buen repertorio de la biodiversidad que encuentras cuando las prácticas agrícolas se llevan a cabo con respeto, disfrutando mucho los dos hijos pequeños de Javi con su recién rescubierto mundo de "buscar bichitos".



Hemíptero

Culebrilla ciega representando el símbolo del infinito

Barlia robertiana

Escorpión (Buthus occitanus)

Lagartija cenicienta (Psammodromus hispanicus)

Araña negra de los alcornocales (Macrothele calpeiana)

Macaón (Papilio machaon)

Eusparassus sp.


Otro día estuve presente en una jornada de anillamiento en la que aparecían algunos primeros estivales como el mosquitero papialbo mientras que un par de lúganos se resistían a marcharse, además teniendo apenas grasa ambos.
Se veían pasar otras migradoras en el cielo con culebreras, milanos negros y hasta un alimoche.
El roquero solitario que aparece en las fotos está anillado si os fijáis, pues Javi mismamente es quien lo anilló en esa cantera para intentar averiguar qué movimientos hacen estas aves, algo que aún no conocemos bien.



Alcaudón común (Lanius senator)

Roquero solitario (Monticola solitarius)

Alimoche (Neophron percnopterus)

Milano negro (Milvus migrans)

Culebrera (Circaetus gallicus)


Tuve hasta tiempo para hacer de apicultor de pacotilla como veis, conociendo de primera mano ese exigente trabajo y también el infinito amor (irónicamente, que quede claro) que sientes cuando las abejas te encuentran un error y consiguen picarte en el tobillo como si no hubiera un mañana.




Aquí estaba fotografiando una macaón, ni con el traje puesto me resisto


No podía acabar sin un poco del maravilloso tapeo estepeño, como ese flamenquín son salsa de almendras y la carnecita en salsa, antes de que en la próxima entrada nos metamos más en faena senderista y pajarera.








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